Son muchas las personas que usan sus móviles para acceder a cualquier tipo de información o datos en cualquier momento. Por eso las empresas hoy necesitan estar dentro de la plataforma móvil. Sin embargo, llegar a los usuarios en este tipo de canal no es tarea fácil.

Lo importante es contar con una estrategia de marketing que determine el mejor enfoque para conseguir que la compañía, le de a los usuarios una conexión inmediata a sus usuarios con ella por medio de móviles. Por eso muchas empresas crean sus propias aplicaciones.

El desarrollo de aplicaciones se implementa desde dos enfoques diferentes, pero ambas sostenibles y rentables: aplicaciones móviles y aplicaciones web.

Pero, ¿cuáles son las diferencias entre las aplicaciones web y las aplicaciones móviles?

Si pensaste que se trata de dos estrategias, tu respuesta es incorrecta. Ya que ni siquiera entre ellas se manejan la misma tecnología y de alguna forma u otra sus capacidades pueden llegar a ser limitadas. Entender las diferencias de una y otra es crucial para crear un nuevo producto efectivo y digital.

Una de las recomendaciones más importantes en la inversión del desarrollo de tu aplicación, es tomar en cuenta los principales requerimientos de seguridad que pueden ofrecerle a los usuarios.

Para conseguir esto, hay que responder a la pregunta “¿cuál debo elegir entre una aplicación móvil o una aplicación web móvil?”. Darle respuesta a esa pregunta nos lleva a dos cosas, primero preguntarnos sobre cada aplicación y sus características, y después entender cuál es más segura de las dos.

Recordemos que la ciberseguridad es importante cuando ofrecemos un producto como una aplicación. Ningún usuario querrá usar una app si esta supone un riesgo para privacidad y seguridad. Por ejemplo, es por eso que desarrolladores de VPN siempre encuentran formas sencillas de ocultar la dirección IP, ya que su producto debe ser funcional y práctico.

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¿Qué es una aplicación móvil?

La app es una aplicación que se descarga en un dispositivo móvil. Esta consume un espacio de almacenamiento en el dispositivo para funcionar. Además, algunas pueden trabajar sin conexión a internet y no existe un kit de lenguaje preciso para su desarrollo, a diferencia de una aplicación web que se construye con JavaScript, CSS y HTML5.

Estas aplicaciones establecen de manera inmediata un vínculo de servicio-usuario. Los desarrolladores que dominan la app móviles son iOS y Android, seguidos por Microsoft.

¿Qué es una aplicación web?

Una aplicación web es un sistema operativo independiente que se ejecuta en cualquier navegador web. No se necesita de descarga ni de ningún tipo de instalación por lo cual no es relevante el dispositivo del usuario. Pueden abarcar una o más páginas en su ejecución, todo depende de su formato.

Una de las ventajas que tiene desarrollar una app web es que, la facilidad de acceder a ella puede ser posible mediante cualquier navegador indistinto de la plataforma subyacente.

No es imprescindible la construcción de una plataforma que se encuentren a una medida específica de un dispositivo. Por lo cual está característica permite la disminución de esfuerzos de desarrollo y no necesita la transferencia de múltiples códigos.

Aplicaciones móviles vs aplicaciones web en torno a la seguridad

Cabe destacar que nadie en internet está a salvo de los riesgos de ciberseguridad. Es por eso que los estándares de seguridad son esenciales en el desarrollo de cualquier tipo de aplicación, sea web o sea móvil, así se evitarán fallas desastrosas a futuro.

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Esto quiere decir que, desde el proceso de desarrollo de una aplicación deben implementarse medidas de seguridad adecuadas. Supongamos que una app no se prueba o autentica contra amenazas de seguridad en etapas iniciales de desarrollo, ¿será lo suficientemente segura? La respuesta es no.

Se dice que una app móvil es más segura que una basada en web porque estas pueden descargarse desde una tienda de aplicaciones. Es decir, la tienda garantiza que una app ha pasado por la evaluación de Google o Apple, afirmando que es segura y compatible con un dispositivo.

Podemos decir que las tiendas de app son filtros para saber si una app es segura o no. Pero hemos visto casos en los cuales estos filtros son saltados, por lo que no hay que confiarse del todo. Por eso siempre que instales una app móvil, asegúrate de saber quién es el desarrollador y verifica sus políticas de almacenamiento y procesamiento de datos.

Las aplicaciones basadas en la web se cargan desde un navegador de internet, lo que no es garantía de seguridad. Aquí los usuarios no tienen que descargar la aplicación, ni preocuparse por sus actualizaciones. Por eso operar en una aplicación web puede ser un poco más riesgoso que una app móvil.

Para ambos casos, el deber ser es que en sus etapas temporadas de desarrollo puedan incluir medidas de ciberseguridad que las respalde.