HomePod, los parlantes inteligentes de Apple, no tuvieron el debut soñado. Nada tiene que ver el ritmo de ventas sino los daños que ocasionó a una gran cantidad de usuarios.

El caso es conocido en las redes como #RingGate y, tras las numerosas quejas, Apple debió reconocer que los HomePod dejan marcas redondas cuando son utilizados sobre una superficie de madera.

La explicación de Apple recordó al del Antenna Gate, que obligó a la empresa a dar indicaciones sobre cómo debía sostenerse el iPhone 4 para que las manos no bloquearan la única antena del dispositivo y se cortaran las llamadas.

El #RingGate se suma al escándalo desatado tras conocerse que Apple ralentizaba los iPhone viejos a propósito.

La base, el problema

Los HomePod, que solo se venden por el momento en EEUU, Australia y Reino Unido, dejan una especie de anillo de color blanco en la madera a las pocas horas de uso.

La base de los HomePod es de silicona y esa es la causa del problema. En la página de soporte, Apple aclaró el asunto pero sin asumir responsabilidad. De hecho, dijo que “no es inusual que los altavoces con bases de silicona amortiguadora de vibraciones dejen marcas cuando son colocados en superficies de madera”.

En su explicación, Apple detalló que “las marcas podrían ser causadas por aceites que se difunden entre la base de silicona y la superficie de la mesa”.

Sin solución

Apple mencionó que las manchas suelen desaparecer solas, luego de unos días, al quitar el parlante de la superficie de madera.

Si esto no ocurre, la solución es “limpiar la superficie suavemente con un paño húmedo o seco. Si las marcas persisten, limpiarla con el proceso de recomendado por el fabricante del mueble”.

Pero quizás la mejor opción sea la última recomendada por Apple: “Si le preocupa esto, le recomendamos colocar su HomePod en una superficie diferente».

Los HomePod cuestan u$s350 y quizás por ese valor el usuario podría haber esperado que los parlantes no dejaran marcas.