La Comisión Europea multó con 2.420 millones de euros a Google por abusar de su posición dominante en su servicio Shopping, poniendo fin así a una investigación que se extendió por más de dos años.

«Google inventó muchos productos y servicios innovadores que hicieron una diferencia en nuestras vidas”, dijo la comisaria europea Margrethe Vestager. “Sin embargo, la estrategia para su servicio de comparación de compras no era sólo la de atraer clientes por tener un producto mejor que los de sus rivales. En lugar de ello, Google abusó de su dominio del mercado como motor de búsqueda mediante la promoción de su propio servicio de comparación de compras en sus resultados de búsqueda, y la degradación de los de los competidores”.

Además de abusar de las normas antimonopolio, la conducta de Google quitó chances a otras empresas por competir y a los consumidores de tener “una elección real de los servicios y los beneficios de la innovación”.

Esta es la mayor multa que aplica la CE en su historia, muy por encima de los 1.100 millones de euros que tuvo que pagar Intel en 2008, hasta ahora la más importante.

Kent Walker, vicepresidente senior y general Counsel de Google expuso la posición de la empresa, que presentaría una apelación: «Cuando compras online quieres encontrar los productos que estás buscando de manera fácil y rápida y los anunciantes promocionarlos. Es por ello que Google muestra shopping Ads. Estamos en desacuerdo con las conclusiones. Vamos a revisar la decisión y consideraremos apelar«.

La demanda

La CE multó a Google por las prácticas sobre su producto Shopping, un servicio de compras que tendría privilegios al momento de mostrarse entre los resultados del buscador.

De acuerdo con la CE, los resultados del servicio de comparativas aparecían antes que los de sus competidores no por mérito propio sino por las acciones de Google.

El buscador alega que la competencia era castigada por no cumplir con ciertos parámetros, pero la CE entendió que Google no aplicaba esas mismas directrices sobre Shopping.

De hecho, asegura el antecesor de Shopping, Froogle, fracasó por no tener tratamiento favorable entre los resultados de las búsquedas en Google. Al rebautizarlo y beneficiarlo, la competencia se vio afectada.

De allí que la CE entienda que Google abusó de su posición dominante y privara a los consumidores de obtener resultados más relevantes.

Google aún puede recibir nuevas sanciones ya que la CE investiga abuso de posición dominante por el buscador en Android y tiene en vista el servicio de publicidad AdWords.

 

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