Apple quitó el conector de audio de sus iPhone 7, una movida que aprovechó para anunciar unos “revolucionarios” auriculares inalámbricos llamados AirPods.

Con 24 horas de autonomía, tienen la inteligencia suficiente para encenderse o apagarse al detectar si están dentro de la oreja del usuario o no. Hasta ahí, todo excelente. Pero llegó el fin de octubre, fecha en que se esperaba estén disponibles, y no es así.

Apple explicó que necesita más tiempo para desarrollarlos, pero no dio detalles sobre qué aspectos debía mejorar. “La reacción a los AirPods ha sido increíble. No creemos en lanzar un producto antes de que esté listo y necesitamos un poco más de tiempo para entregarlo a nuestros clientes”, explicó la empresa a TechCrunch.

Con un precio esperado de u$s159, ningún cliente querrá que los AirPods comiencen a presentar fallas como las que denuncian algunos de los periodistas que los recibieron durante la presentación de los iPhone 7.

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